La estatua de piedra negra, Mary Elizabeth Counselman

 Mary Elizabeth Counselman (19 de noviembre de 1911, Birmingham, Alabama - 13 de noviembre de 1995) fue una escritora estadounidense de cuentos y poesía.

Las obras de Counselman fueron publicadas en distintas revistas y diarios como Weird Tales, Collier's, The Saturday Evening Post, Good Housekeeping, Ladie's Home Journal y otras. Sus historias fueron dramatizadas en General Electric Theater y otros programas de televisión nacionales de Estados Unidos, Canadá, Islas Británicas y Australia.

Counselman comenzó a escribir "ficción extraña" para las revistas pulp en la década de 1930. Su cuento "The three marked pennies", escrito mientras era adolescente y publicado en Weird Tales en 1934, fue uno de los tres más populares en toda la historia de la revista.

La estatua de piedra negra (The black stone statue) es un relato publicado originalmente en la edición de diciembre de 1937 de la revista Weird Tales, reeditado posteriormente en la antología de 1964 "A medias en las sombras".

Sin duda se trata de uno de los grandes cuentos de Counselman, convertido en un verdadero clásico de la literatura pulp, por motivos que van mucho más allá de su argumento.

El relato comienza cuando el narrador, en primera persona, un escultor, cuenta su historia en una nota de suicidio enviada a los directores del Museo de Bellas Artes de Boston, quienes le han solicitado, debido a la espectacularidad de sus obras, una estatua de sí mismo.

La historia trata sobre el encuentro casual que tiene el protagonista con un piloto y aventurero, Paul Kennicott, al que se tenía por desaparecido. Ambos tienen sendas habitaciones alquiladas en una deprimente pensión.

El narrador empieza a escuchar unos sonidos y zumbidos muy extraños sin que, en un primer momento, pueda determinar el origen de los mismos. Posteriormente, podrá comprobar que los sonidos provienen de una extraña caja que posee Kennicott.



Este comenzará el relato de su aventura (una segunda historia dentro de la primera), la cual dará explicación a la existencia y el contenido de la extraña caja. Cuando Kennicott y su copiloto sobrevolaban Brasil tuvieron un accidente, tras el cual fueron considerados fallecidos aunque no se les pudiera encontrar, debido a lo cual Kennicott se movía, actualmente, en la clandestinidad.

El accidente provocó en Kennicott, por suerte, heridas muy leves, mientras que su compañero no tuvo tanta suerte, sufrió rotura de una pierna y de varias costillas. En un momento dado, Kennicott se aleja para buscar agua para su compañero pero, cuando regresa, este ha desaparecido. Comienza la búsqueda de este, internándose cada vez en la frondosa maleza, hasta que comienza a oír unos extraños sonidos.

Siguiendo esos sonidos, pensando que su compañero, a lo mejor, había seguido ese sonido también, se encuentra inmerso en un bosque de piedra negra. Todo a su alrededor, árboles, rocas, piedras, hojas, etc. es de piedra negra reluciente.

El zumbido seguía siendo persistente, creando en Kennicott un malestar cada vez más insoportable. Una vez que se sentó junto al petrificado tronco de un árbol, para descansar un poco, divisó a lo lejos lo que creía que era una columna. Sin embargo, cuando se acercó pudo comprobar que se trataba de una estatua, con todo lujo de detalles, de su desaparecido compañero.

Pero las sorpresas no terminarán con este descubrimiento. Momentos después, junto a un arbusto, se encontrará se encontrará con una especie de baba con forma de estrella, gelatinosa y transparente, que brillaba y cambiaba de color. Parecía ser un animal primigenio, unicelular, que se extendía por la arena como un caracol. El zumbido provenía de esa cosa.

Kennicott tuvo la acertada intuición de no tocarla, ni siquiera con la punta de sus botas, pues cuando le lanzó sus gafas, y estas entraron en contacto con el ser, aquellas se convirtieron en piedra negra. En ese momento, Kennicott supo que le pasado a su compañero.

Una vez recuperado de tantas sorpresas, Kennicott comienza a darse cuenta de las múltiples posibilidades que puede tener ese descubrimiento como material indestructible...puentes, casas, edificios, carreteras, etc. Por lo tanto decide capturar al ser y llevarlo a la civilización.

Ese es el motivo por el que se encuentra en poder de esa caja que emite zumbidos y sonidos, y el porque se encuentra "escondido" de momento.


El desenlace de este interesante relato lo podéis encontrar en:

Podcast Relatos de Misterio y Suspense (Javier Matesanz)

El espejo gótico




6 comentarios:

  1. Hola Antonio!! Estupendo relato el que nos propones, iré al podcast y me lo descargaré. Besos!!

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    1. Hola Ana, creo que te gustará, así lo espero. Gracias por la visita.
      Un beso.

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  2. Buscaré un rato para leerlo, Antonio.
    Conociendo tus recomendaciones, seguro que me gusta.
    Un fuerte abrazo :-)

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    1. Pues estoy casi seguro que este te gustará, tiene un gran final.
      Un abrazo.

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